La portavoz de FORO en Carreño, Susana Corredor, ha explicado las razones de su voto negativo a la instalación de un albergue canino en Tamón. Corredor señala que “tras el recurso de defensa de los animales se esconde lo que a todas luces es un negocio privado puro y duro. No se puede consentir que con la excusa de atender a una cantidad, no superior a 15 perros al año, en Carreño, se oculte la realidad: un negocio con unas instalaciones que nada tienen que ver con la defensa de los animales sino con la creación de una empresa en el más estricto sentido de la palabra.
Utilizan el argumento del cuidado y atención de los animales para acaparar la atención de los sectores animalistas, ni más ni menos, y mientras los vecinos reciben negativas a la hora de poder construir una vivienda para sus hijos, porque en esos terrenos no se puede construir una vivienda, sí se puede levantar una residencia canina, un centro de convenciones, una peluquería canina, un hospital veterinario, una vivienda y por supuesto un albergue para aquellos 15 perros aproximadamente que Carreño pueda encontrar abandonados en sus calles, solo faltaba que no fuera así. Además del Alcalde de Carreño, su equipo y de los promotores del proyecto, es imposible que con la documentación y los argumentos puestos sobre la mesa pueda defenderse que se trata única y exclusivamente de amor a los animales en todo este entramado”.
“El PSOE”, añadió, “una vez más, lejos de pensar en los carreñenses, se atreve a manifestar, en palabras de Amelia Fernández ‘cada uno elige dónde vivir, a quien no le guste que se vaya a otro sitio’. Es intolerable que un representante de los ciudadanos haga semejante análisis, máxime cuando los vecinos llevan viviendo en Tamón, generación, tras generación y ya es una zona que está suficientemente castigada”.
“Este proyecto que ya viene rebotado de otros municipios, persigue la defensa del interés privado sobre el interés de Carreño y la recalificación de unos terrenos que no lo han podido ser para el conjunto de los vecinos de la zona pero sí para el desarrollo de una actividad de negocio privada que además va a estar sustentada por la vía de la subvención pública”.
“No podemos dejar de preguntarnos”, detalló, “¿Cuál va a ser el desembolso que desde el Consistorio se deba hacer para la adecuación de la zona, carreteras, suministro eléctrico, canalización de agua, etc...,? Estos servicios que hasta ahora les han sido negados a los vecinos, pero que si facilitarán, raudos y veloces, para garantizar el buen funcionamiento del negocio veterinario que se esconde tras el status de fundación”.
“Ante un proyecto a todas luces injustificable e innecesario, vista la oposición de los vecinos y puesto que se puede establecer un convenio con Gijón para cubrir la necesidad real que Carreño tiene y que los animales abandonados se merecen, FORO votó en contra del proyecto de instalación de un albergue canino en Tamón, en el pleno celebrado el 31 de julio” concluyó.
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